Se cumplen 500 años de la Reforma Protestante
Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá. Romanos 1:17.
En el mes de octubre no celebramos Halloween, sino que celebramos el movimiento de la Reforma Protestante, este año se cumple el 500 aniversario, basado en los cuestionamientos y propuestas que hizo Martín Lutero acerca de las enseñanzas y prácticas de la iglesia en el siglo XVI.
Este fraile y teólogo clavó en la iglesia de Wittenberg en Alemania, 95 tésis que cuestionaban la compra de la salvación por medio de indulgencias, concluyendo la revisión de la teología que la iglesia enseñaba y practicaba en el siglo XVI.
De las 95 tesis, existen 5 que recogen el pensamiento del movimiento de la reforma, las cuales nos acercan a nosotros no como evangélicos, sino como cristianos. Estos 5 puntos se conocen como las “5 Solas de la reforma”, en forma concreta son:
SOLA SCRIPTURA (Solo la escritura)
Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones. 2 Pedro 1:19.
Esta primera “Sola” nos llevaría al descubrimiento de las 5 restantes. Nos define el papel y la importancia de la escritura y nos establece la base de la autoridad. 2 Timoteo 3:16-17 nos dice que “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redarguir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.”
Necesitamos hacer un paréntesis histórico y valorar porqué solo la escritura.
El libro de Efesios nos dice en el versículo 2:20, el cual ha sido objeto de interpretaciones erróneas, lo siguiente : “edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo”. En el momento que se escribió este texto, la iglesia entendía que la revelación de los profetas era la revelación completa y esta se cumplía en Cristo Jesús. El versículo identifica a Jesús como cabeza de la iglesia y como su base de autoridad.
Durante el Siglo I y II, la iglesia funcionaba como una unidad espiritual no organizativa, la cual estaba dirigida por presbiterios y ancianos.
En el Siglo III aparece el emperador romano Constantino quien realizó una movida política en la iglesia a su favor. El necesitaba ser emperador de Roma y usó políticamente a los cristianos para lograr sus propósitos. Todos los que no eran cristianos eran sus votantes, pero encontró una solución para obtener también sus votos, al darle a cada uno de los grupos de ese momento lo que querían: protegió a los cristianos pensando que le ayudarían a unificar su imperio y creó una alianza con los obispos que cedieron en asuntos doctrinales a cambio de pagar menos impuestos y recibir subsidios. El no buscó la verdad, sino la pluralidad religiosa.
La iglesia católica tuvo un acta de nacimiento, la cual se dio con Constantino. El no fue el primer Papa, sino que Papa fue una palabra que inventó Urbano II en el siglo XI; el creó dicho concepto y se asignó dicho nombre como el primero.
Esto tiene reincidencia en lo que somos, no es dogmático, es historia. La realidad es que estas personas “secuestraron” la iglesia, y la posición administrativa recayó sobre la cabeza principal; la cual era el Papa y no Cristo. Emitieron un decreto donde indicaban que el único ente de autoridad con derecho a interpretar la Biblia era el Papa.
La segunda carta a los tesalonicenses capítulo 2 y versículo 15 nos indica: “Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra.”. Sin embargo; en la versión en la biblia católica se usa intencionalmente dicho versículo cambiando el contexto por lo siguiente: «Así pues, hermanos, manteneos firmes y conservad las tradiciones que habéis aprendido de nosotros, de viva voz o por carta.”. La segunda autoridad en la iglesia católica es la autoridad civil, y han utilizado la tradición como fuente de autoridad.
La palabra en el escrito original en la versión Reina Valera es “ordenanzas”; que no es lo mismo que “tradiciones”.
Los reformados afirman que todo lo que los apóstoles nos enseñaron fue lo que Jesús les enseñó. Ellos dieron de lo que se les dio: la palabra de Dios. 2 Pedro 1:3-7 nos enseña:
Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia; vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor.
La autoridad la tiene la palabra. Debemos buscar al autor de Quién la dijo. La revelación de la autoridad divina se debe al trabajo del Espíritu Santo; así que la única autoridad la tiene la palabra de Dios, no el hombre.
SOLUS CHRISTUS (Solo Cristo)
Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos. Hechos 4:12.
El versículo anterior es claro: la salvación se encuentra solo en Cristo Jesús, no hay otro camino. No hay otro, no hay intermediarios.
Durante el siglo XVI la iglesia vendía la salvación a cambio de indulgencias, esto es que se le entregaba un documento a la persona que pagaba un monto para “comprar su salvación”. La Basílica de San Pedro en el Vaticano fue construida con dicho dinero.
Lo triste es que hoy en día, emulando a estos religiosos, se le agregan más cosas a Cristo para ser salvos. Necesitamos ser cristianos reformados. Todos los días debemos reformarnos, esto significa ajustarnos a Cristo Jesús, no a un mensaje a medida de la clientela sino a uno que nos reforma continuamente a Cristo Jesús.
SOLA GRATIA (Solo por gracia)
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios. Efesios 2:8.
La gracia es la expresión del amor de Dios, que en misericordia se manifiesta en gracia permitiendo que Cristo Jesús se identificara como hombre sin dejar de ser Dios, siendo cuestionado e imputado como hombre en lo judicial para pagar aquello que nos apartaba de Dios. ¡Ninguno de nosotros merecía nada!
No venimos a la iglesia a ser motivados. Venimos motivados porque sabemos quién es Cristo Jesús. Cuando nos acordamos de quiénes somos en Cristo, la depresión se va.
La gracia es una expresión del amor de Dios, es un don, no lo merecíamos. Dios nos amó dando su vida por nosotros al ver nuestra miseria, no hay ni una sola obra que hagamos para ser merecedores de su gracia. No sabríamos el alcance de la misericordia de Dios sin la escritura.
SOLA FIDE: (Solo Fe)
Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá. Romanos 1:17.
Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley. Romanos 3:28.
El justo es aquel que ha sido objeto de la gracia de Dios, el que ha sido apartado, el que ha sido bañado con la sangre de Cristo, el amor del Padre revelado en su Hijo por el poder del Espíritu Santo.
Sin embargo; muchas veces los redimidos buscan obras, para que Dios los acepte; pero no hay un solo acto que hagamos que se compare a lo que Cristo hizo, y lo que Él hizo fue completo. Si necesitamos algo es porque no sabemos que Cristo ya lo hizo.
¿Para qué me pides más? ¿Para qué me pides que te bendiga más? ¡Ya te he bendecido con toda bendición espiritual! : Efesios 1:3 “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo”.
¡Yo estoy en tu corazón y tu en mi! ¿Qué puedes desear o necesitar más? : “Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste” Juan 17:20-21
– Envié a mi hijo en propiciación tuya:
En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados. 1 Juan 4:10.
SOLI DEO GLORIA (Solo a Dios sea la Gloria)
No hay objeto u hombre que merezca la adoración, solo Cristo Jesús porque así Dios lo ha establecido en su palabra.
Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas. Apocalipsis 4:11.
Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. Filipenses 2:9-11.
Que toda la adoración venga al hijo es una directriz con propósito, porque al final de los tiempos Jesús tomará todo y lo pondrá a los pies del Padre. No hay hombre u objeto que merezca adoración; sin embargo aveces adoramos sin saber lo que adoramos.
Cualquier cosa que nos quite el tiempo que no sea Dios, es nuestra prioridad, cualquier cosa que ocupe el primer lugar a eso estamos adorando.
A menudo es fácil venir a la iglesia a levantar manos y postrarse según la liturgia, pero la pregunta es si tengo ese nivel de entrega en mi día cotidiano. Si soy una persona consecuente y los demás pueden decir: ese hombre y mujer son cristianos porque vemos a Cristo en ellos.
Cuando sabemos que tenemos un problema determinado lo llevamos a los pies de Cristo. Dejamos de luchar y adoramos a Cristo. Sabemos lo que pertenece a nuestra vieja naturaleza y recordamos que EL JUSTO POR LA FE VIVIRA, reconocemos que Cristo clavó TODO lo que producía muerte, que El mató nuestra vieja naturaleza, que si Cristo llama a algo pecado nosotros también lo llamamos pecado y aunque no lo queramos se lo entregamos, clamamos para que nos de el correspondiente en nuestra nueva naturaleza. – “Señor toma mis ganas de mentir, esto es de mi vieja naturaleza, te la entrego, y Dios me da lo correspondiente: integridad.»
Dios permita que seamos fieles, pero no estamos para recibir una prédica, ni para cumplir requisitos, sino para dar testimonio de lo que Cristo ha hecho en nuestra vida. No se viene a la iglesia a aprender liturgia, sino a tener una vida de adoración. Usted y yo debemos ser cristianos reformados. Reformados conforme al propósito de Dios, cuando usted sea reformado no solo reformará su vida, también su familia, su trabajo, porque el que reforma vive con usted y usted proyecta al que reforma.
Sino fuese por la reforma no hubiésemos conocido que somos personas con destino, y destino eterno, nunca seríamos personas libres, agentes de cambio, pero el cambio lo experimentamos primero en el corazón.
Vivimos en una sociedad que cuestiona la ética, donde a lo malo le dicen bueno y a lo bueno le dicen malo; pero es importante que seamos personas reformadas al mensaje de Cristo Jesús.
La iglesia y la persona, y el individuo solo pueden ser reformados de manera correcta si son reformados por la palabra de Dios, si la palabra es puesta en su corazón y es regada y cuidada en su corazón, solo si la palabra le trae a Cristo Jesús.
Prédicas Recientes
Oyendo la voz de Dios – Dios quiere hablar
septiembre 01, 2024
La Realidad Invisible – Una Victoria Garantizada
agosto 28, 2024
La Realidad Invisible – Cuidado con los Anatemas – Parte 2
agosto 18, 2024