Devocional: Consejos Prácticos para Jóvenes – Día #2

Plan devocional Día 2 de 8

“No debe emborracharse ni ser violento. Debe ser amable, no debe buscar pleitos ni amar el dinero.” 1 Timoteo 3:3 El versículo nos pone a pensar que son cosas complejas de lograr, porque muchas veces nuestra carne busca lo opuesto. Quiere dinero, que no nos lastimen, que nos defendamos y no nos dejemos pasar por encima. Nos dice que la diversión está en el alcohol o la fiesta  y que el pelear o ser violento hará que te respeten. ¡Todo es mentira! Éstas, en lugar de hacerte feliz, te harán esclavo. Pablo le dice esto a Timoteo como parte de su formación como líder. Pablo quería que él fuera un líder que experimentara sanidad y libertad en Cristo. ¡Y nosotros podemos experimentarlo también! En momentos de mi vida tuve que luchar con todas las cosas mencionadas en el versículo, e incluso otras más, pero con la ayuda de Dios y la Biblia he visto victoria. Quizás sigue sonando general y abstracto, por eso quiero comentarles un testimonio. ¿Solo uno? Sí, porque vas a ver que aprendiendo a hacer esto encontrarás la guía para luchar con las demás. El mundo me enseñó que siendo violento y metiéndome en peleas obtenía lo que quería. Sentía que la gente me respetaba y cada vez que actuaba de esta forma (con enojo y peleando) me terminaban haciendo caso. Pero esta no era la verdad. La verdad es que era esclavo de la ira, y no vivía libre. Perdí personas que amaba y viví mucho tiempo amargado. ¿Cómo vencerlo? Con la Biblia. Sé que tal vez suena general, pero puedes hacerlo personal. Busca versículos que hablen sobre el tema con el que luchas, memorízalos, y cada vez que te enfrentes a la situación di el versículo. Saca tiempos a solas con Dios y pídele sabiduría, guía y paz. Si en algún momento sientes que no puedes más, trata de buscar un lugar a solas y habla con Dios. Si no sabes cómo luchar o crees que nada te ha servido busca a alguien de la iglesia que pueda ayudarte, para eso es la iglesia, para ayudarnos y luchar juntos. ¿Qué aprendí haciendo estas cosas? Que para cada mentira que Satanás me pone en la cabeza, en la Biblia hay una verdad que me dice quién soy en Dios y el Espíritu Santo me da las herramientas para crecer y mejorar cada día. También aprendí que hay fortaleza y victoria en pedir ayuda. Dios va a mi lado en cada lucha y está dispuesto a enseñarme y ayudarme en todo lo que necesito para ganarla. Dios quiere que lideres. Ya sea en tu casa, a tu familia, en tu cole, U, trabajo, o en donde sea que Él te haya puesto, pero quiere que lo hagas sanamente, como una persona sana y libre, que guíe a las personas a conocer más de Cristo cada día. Oremos:

“Señor, te pido que transformes mi corazón, que me hagas humilde, que me guíes y me des fuerzas para cambiar lo que no te agrada de mí y aún no he podido cambiar. Si hay violencia o ira en mi corazón, límpiame. Si hay heridas que no me dejan ser amable, sáname, y hazme cada día más como Jesús. Si mi corazón y mi tesoro están en el dinero o cualquier otra cosa, te pido perdón, hoy busco ponerte en primer lugar y creer en tus promesas y no en lo que el dinero o el mundo me puede dar. Fórmame como un líder sano y libre que busca hacer tu voluntad y llevar tu nombre a los que no te conocen. En el nombre de Jesús. ¡Amén!”

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Carlos M.

(23 años, 6 años de conocer a Jesucristo y 4 años sirviendo en la Iglesia)