Devocional: Libertad sobre la Religiosidad – Día #1

¿Religión o Relación?

Plan Devocional Día 1 de 5

Así es, todo lo demás no vale nada cuando se le compara con el infinito valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por amor a él, he desechado todo lo demás y lo considero basura a fin de ganar a Cristo” 

Filipenses 3:8

Lamentablemente podríamos citar con muchos ejemplos lo que es la religiosidad; algunos que nos menciona la palabra de Dios son:

* Religiosidad es un hombre que al estar a la luz de la palabra y la escucha no la pone en práctica. Nos estamos engañando a nosotros mismos. Santiago 1:22

 * El que no tiene compasión por los demás, por mantener su posición social. Lucas 10:30

* Podemos diezmar, orar, ayunar y aparentar ser muy ¨devotos¨ pero cuando en realidad no exaltamos a quien merece ser exaltado si no a nosotros mismos. Lucas 18:9-14

Aunque hay muchos ejemplos de lo anterior, lo que realmente importa y lo que tenemos que ver en nosotros mismos es, si tenemos una relación genuina con quien decimos es nuestro Señor y Salvador. ¿Y cómo iniciamos una relación con Dios?

Cuando reconocemos nuestra bancarrota espiritual, cuando reconocemos que somos indignos de merecer lo que por gracia y amor se nos ha otorgado y le buscamos porque solo en Él hay esperanza y salvación. Cuando no confiamos en nuestro propio consejo y dependemos de Su guía.

Nuestra relación con Dios crece cuando hay una genuina búsqueda y hambre por su presencia; al experimentar su palabra en cada situación de nuestras vidas demostrando que nuestra relación con Dios y Su hijo Jesucristo es real, cuando hablamos a otros sobre lo que Él ha hecho en nosotros y como Su amor puede transformar todo.

El apóstol Pablo menciona en Filipenses 3:8 todo lo que él era antes de conocer al Señor y lo orgulloso que estaba de si mismo, pero luego de conocer a Cristo lo consideró todo como pérdida. ¿Estamos nosotros conscientes de lo que el Señor ha hecho y que todo lo demás realmente es pasajero así tan claro como lo era para Pablo?   

Oremos:

Señor te damos gracias por tu amor y tu gran fidelidad, por todo lo que has hecho en nosotros tus hijos, te pedimos que nos muestres cuando nos estamos desviando del propósito que tú tienes para nosotros, que siempre estemos atentos a tu voz y a tu dirección, que tu voluntad sea hecha en nuestras vidas, amén.

Christopher Rojas